FLORIDIANO
A este columnista se le ha ocurrido una idea brillante: va a buscar residir en la ciudad de Orlando, Florida. Como residente, va a declararse población, que es igual a no se metan conmigo que protesto. Y como población, obvio, este columnista va a tener exigencias. La primera: que Mickey hable en español. No vamos a aceptar de ninguna manera que diga hello, considerando que en Florida los hispanohablantes son más del 20% del estado.
SEGUNDO
Por favor, que quede claro que los Rent a Car cobren sus alquileres hasta un tope, que como población tenemos que supervisar, para que se beneficie el turismo en la región con más rentas. Si proponen sus tarifas con descuento y no nos parece, exigimos que las bajen más y los llamaremos abusivos, y les diremos en su cara pelada que no se burlen de nosotros, los floridianos que somos los únicos que sabemos cómo se debe desarrollar el turismo.
TERCERO
Y tercero, que la reunión de coordinación sea en los húmedos Everglades y no aceptaremos otro lugar. Mientras no haya una respuesta coherente con las expectativas de la población, se cierra el acceso a los parques de diversiones, y los que tenían reserva tendrán que entender que esto lo hacemos precisamente por el bien de ellos, para promover el turismo a precios justos. Esperamos, además, que la Blancanieves se sume a la causa.
NO CEDEREMOS
Que quede claro que no hay nada que negociar. Se cierra todo hasta que las exigencias sean cumplidas. Y si es posible quemar algo a la vista sin ir presos, se hace. Especialmente un poco de fuego inofesivo pero abundante y maloliente, que no afecte a nadie, pero que impacte en los noticieros como fenómeno social.
SHHHH
Finalmente, cuando no lleguemos a nada, y nosotros mismos nos pongamos tan intransigentes, levantaremos la medida de protesta pero enérgicamente, con repudio a los que no atienden nuestro pedido de pobladores, pero solapa nomás, porque ya nos cuadró el primo que no ha vendido nada de artesanías en la última semana.
SOMOS EXIGENTES
Por supuesto, como en Florida no es posible quedar mal con un retroceso de un justo reclamo, anunciaremos una nueva paralización algunas semanas más adelante, porque hay algo inherente al hecho de ser población: tenemos exigencias, estamos en modo de protesta constante y tomaremos medidas hasta que sean satisfechas, salvo pausas solapas que por suerte nadie, pero absolutamente nadie se da cuenta.
SUENA CONOCIDO
Si les sonó ridículo, un poco demasiado, ok lo aceptamos, pero digan entonces por qué tendría que ser diferente, por qué allá nunca pasa y en esta tierra donde el indómito inca prefirió morir sí.
LA RAZÓN DE SER
Este columnista tiene su arbitraria opinión: lo que ha pasado esta semana no es una guerra entre cusqueños y limeños, no. Tampoco lo es entre ricos y pobres, eso es un grupo musical italiano, muy bueno por cierto. Tampoco es entre comunidades abusadas y oligarcas explotadores. No, no lo es. Enfoquemos bien. Es un problema entre la formalidad y la informalidad. Y nos referimos a lo segundo como una forma de hacer negocios y relacionarse con las oportunidades diferente, improvisada, sin seguir reglas, y no siempre con toda la lógica del mundo.
LA DIFERENCIA
El formal pide reglas de juego claras y estabilidad, que no se las cambien. El informal espera el peso de la costumbre, el absurdo institucionalizado, el privilegio atornillado. Vendo película pirata desde hace años, por eso nadie se sorprende y nadie me acusa de nada. De eso se trata. Dale al informal una millonaria recaudación y se va a disfrazar de formal, se va a vender como empresario, pero te va a demostrar permanentemente su estrecha visión.
AHÍ ESTUVIMOS
Este columnista estuvo hace exactamente 15 días en Machu Picchu, la verdad que de paseo, aprovechando estar en la zona, y con todo listo solo faltaba comprar el pasaje de Consettur con anticipación.
DE NO CREER
La web daba dos opciones de moneda: dólares y suelas. ¿Suelas? Sí, así decía y así sigue diciendo. Solo por ese hecho de confundir la moneda nacional la empresa debería tener una acción. Quizás el resto de los peruanos que amamos el sol de oro, les hacemos un bloqueo, con quema de llantas, por despreciar nuestra moneda.
HASTA LAS SUELAS
Seguro deben pensar, nooo, cómo va a ser, ya sería demasiado. Lo mismo opinamos. Así decía, así compramos, y así sigue diciendo.
NO LA RESPONDIMOS
La pregunta es cómo una web relacionada a un atractivo y con capacidad de cobro con tarjeta de crédito puede equivocar así estos detalles.
ES CULTURAL
Eso es la informalidad. No necesariamente tener tu puesto ambulante cerca a un mercado. Informalidad es la cultura de la improvisación, es el “no pasa nada”.
DE NO CREER 2
La misma página te permite definir tu género con dos opciones: metro y femenino. ¿Metrosexual? Ya con este segundo error, suficiente para tomar acciones. ¿Qué clase de empresa cobra on line con estos errores? Véanlo.
LA NO FORMALIDAD
O sea, mismo polo Lacoste con cocodrilo pegado con scotch, así igualito. Mismo Tico con cuatro anillos de Audi, puesto en galería que cuando pides factura te dice, con factura cuesta más. O sea, ¿nos explicamos? Tu envidia es mi progreso.
HASTA LAS SUELAS
No es un tema de que ellos sean cusqueños y quien escribe no. No es que uno tenga privilegios y los enrostre. Podría ser una empresa emprendedora con todo ordenadito, pero recaudar cerca de 60 y pico mil dólares al día en sus buenos tiempos, no les ha dejado espacio para contratar a expertos en correcciones.
ERROR MAYÚSCULO
Esa misma tía regia que ahora pone caritas felices porque se levantó la huelga, seguro dirá, no es para tanto, obvio que se han equivocado. Claro que sí, errare humanum est, pero con muuuuucho tiempo para corregirlo, no es lapsus de un día. Así se han seguido vendiendo las entradas a la couster, que por cierto, le costó a este columnista 54 soles.
ES UN MERCADO
Ahora, hay una situación nueva: no puedes subir a Machu Picchu cuando se te antoje, te hacen regresar media hora antes de tu entrada al atractivo, que está dividido por horas. Haces cola en una vereda frente a negocios y como el bus está encendido, hace ruido, y una señora guía ofrece sus servicios sin distancia social, casi explicando al oído.
TODA UNA VISTA
Como este columnista tenía tiempo, fue a un restaurante y por la parte de atrás pudo ver el río y el revés de las construcciones hacia el río, un espectáculo que lo dice todo, que marca la diferencia.
DE PESADILLA
Ni ricos ni pobres, ni limeños ni cusqueños, ni grandes empresarios ni emprendimientos: solo informalidad, fea, con su característico caos. Fue espeluznante. ¿Quieren verlo?
ASÍ LO VIMOS
Ahí lo tienen. No es foto prestada, no es foto antigua, no es foto que nos pasaron y no verificamos. Esto que parece Pearl Harbor después del bombardeo, es Machu Picchu Pueblo. La foto tiene 15 días en la memoria de la cámara de este columnista.
QUE QUEDE CLARO
O sea, estos señores que dejan las cajas de chelas al lado del río, que unen plástico, calamina, ladrillo de pared, tinajas, escaleras, basura, son los mismos que dicen que son los que defienden el turismo del Perú y no intereses foráneos.
UNO SOBRE OTRO
Eso no es una comunidad campesina sometida, no es el pueblo alterado por la llegada del turismo, no. Son comerciantes, son emprendedores, son cusqueños que vieron su futuro con la abundancia de turismo y se mudaron donde había negocio y al instalarse crecieron en forma desordenada.
GRAN DIFERENCIA
Ahora, una cosa es que hayan crecido en forma desodenada, que no hayan seguido todas las normas, que hayan construido tantos pisos al lado del cauce de un río, y otra que, además de ser autores de este caos urbano, pongan condiciones de tarifas, modelo de negocio, que impongan una forma de desarrollar el turismo, que se opongan a inversiones y que pretendan que si ellos no aprueban algo no se puede hacer.
IMPACTO VISUAL
Esa cauce de río no es para tantos pisos. No es porque uno sea limeño, porque tenga poca o mucha plata, lo que se ve en la foto es feo, recontra feo, porque lo caótico en la seca Lima o en la húmeda ceja de montaña, se ve mal siempre.
GRAN CONTRASTE
Luego subes y todo es una maravilla, estás en un mundo de película, quieres tomarte fotos por todos lados, es cierto, pero estás entre esa ciudadela de piedra enclavada en la montaña, que es maravillosa, que te deja sorprendido, y este caos que ahorita se derrumba todo de lo improvisado que está. No hay espacio natural en el mundo tan agredido por la improvisación que este.
SE BUSCA
Nos falta alguna autoridad con agallas para abordarlo, que pueda enfrentar tinterilladas. Solo eso permitirá solucionarlo. Cualquier otro proyecto es secundario. La decisión política de indemnizar a la población para reubicarla, u obligarla a viviendas de máximo dos pisos, y extinguir toda posibilidad de que pretendan jaquear el turismo, bloqueando accesos, eso existe como posibilidad, pero parece que no ha nacido el que quiera torear a esa res.
NO PASA NADA
Entendemos perfectamente que una ministra que se queda hasta julio no se va a comprar un pleito tan delicado, pero Claudia Cornejo, en general, y con tan poco tiempo en el cargo como ministra, ha decepcionado. No hizo nada, no dijo nada y en una entrevista al diario Gestión se atrevió a decir, siendo titular del sector, que “ojalá se solucione”. Un poco más y dice no es mi tema.
LO QUE NO HACE
Cornejo ha permitido además que se anuncie una inmovilización de vehículos que afecta a negocios turísticos en su peor año. No parece haber negociado excepciones. Hoteles golpeados, y restaurantes mucho más.
ES COMPLICADO
Hay que enfrentar mucho, pero si no se resuelve, vamos a quedar averiados, verdaderos negocios formales cercanos a la inviabilidad. Necesitamos un estudio definitivo que concluya lo que ha pasado en este pueblo y si lo podemos llamar pueblo en el sentido de originario o es asentamiento sin control.
A INVESTIGAR
Lo primero que debería hacerse es definir quiénes son pobladores históricos, o si son residentes de los últimos años, atraídos por los negocios que acompañan al turismo. Y si es el primo que vino a poner su puesto, y luego, atraído con el negocio, tiene posibilidades de poner condiciones a todo el modelo de desarrollo turístico, eso debe saberse.
SEGUNDO
Estudiar por qué migraron casi todos cuando empezó la pandemia. Es decir, si es que hay pobladores que se dedican a actividades no relacionadas con el turismo. Habría que recordarles que una cosa es vivir del turismo y otra pretender definir un modelo de desarrollo de una actividad cuya relación es que se benefician por su cercanía. La farmacia cerca del hospital no le pone condiciones al hospital. ¿No creen?
CUÁNTOS NUEVOS
¿Cualquiera puede mudarse y empezar a vivir en Machu Picchu pueblo? ¿Cuántos son nuevos pobladores, recientes? ¿Son herederos de algo de lo que vemos en el Santuario, o son comerciantes, que juegan fulbito, celebran con chela, y que por acceso a mejores recursos económicos por encima al promedio del departamento de Cusco tienen gustos sofisticados? Porque vimos harta antena de Direct TV.
ES VÁLIDO
Mientras tanto, hay que preguntarle a la Ministra Cornejo si cuando se presentó el gabinete con el presidente Sagasti ella estaba allí, o era un holograma porque se habló de todo, menos de un paro en marcha y una actividad paralizada que coexistía con la conferencia.
COMO CASI TODO
Porque esta medida de no poder circular con auto en Navidad y Año Nuevo es una de varias medidas inconsultas, como si no tuviéramos una ministra que la observe, como que vendrán otras si es que empieza la segunda ola, y nos enteraremos que se cancelan vuelos o cierran fronteras de domingo para lunes. Eso ya ha ocurrido varias veces.
SON SOLVENTES
Machu Picchu Pueblo debería ser rebautizado como Aguas Calientes, para que las noticias internacionales no vayan a creer que el enfrentamiento es con los herederos directos de los Incas. No, estos son cusqueños acosteñados, comerciantes, que han vivido la bonanza del turismo, y que tienen por norma oponerse y pretender poner condiciones. Ya quisieran los trabajadores agrarios de las cooperativas tener la recaudación que ellos han tenido.
HAY QUE ACTUAR
Claudia Cornejo no va a ingresar a Machu Picchu con un látigo a ordenar almas que nos han dejado averiado el turismo, obvio que no, no se lo recomendaríamos. Pero sí podría pedir estudios con, por ejemplo, las tres mejores propuestas de cómo solucionar este tema que si no se hace nada. Porque ya sabemos que tenderá a empeorar.
ESE NO AYUDA
El que se alegra porque acabó el paro, es el que no ayuda, es el que ya lo está entendiendo como normal, como que toca cuando toca pero luego se resuelve.
CORRESPONDE
Machu Picchu pueblo tiene que reformularse pero para ayer. No embellecerse, no pavimentarse, eso ya se ha hecho, tiene que redefinir su razón de ser, su futuro crecimiento. El gremio cusqueño Cartuc ya mencionó un atractivo secuestrado. Si es así, hay que rescatarlo. Claudia Cornejo no puede ni debe pasar piola ignorando lo que ha pasado, porque ella lo sabe muy bien, si no se toma acciones, solo va a tender a empeorar.
TE RECOMENDAMOS
El último estudio es, Claudia Cornejo, saber si son informales que recaudaron tanto que se volvieron formales, pero que tienen sus brotes de informalidad, como cobrar en suelas en vez de soles. A ver qué dice el estudio.
UN SACRIFICIO
Si el turismo tiene que parar algunas semanas más para darle una solución a fondo lo más probable es que la gran mayoría estará de acuerdo antes de que vuelvan los turistas internacionales. De lo contrario, es una bomba de tiempo.
A INVESTIGAR
El estudio debe dar esta respuesta. Si este eje del turismo está en manos de una comunidad originaria, o si son en realidad residentes de un pueblito improvisado, en su mayoría comerciantes y prestadores de servicios al turista, que pretenden decir con atrevimiento cómo debe funcionar el turismo nacional, hasta en detalles de tarifas y frecuencias, función que le corresponde a las autoridades.
MEDITEMOS
Siéntense y miren bien esta foto. Quienes han permitido esta fealdad, antes de ver tanta belleza, no pueden pretender imponer condiciones sobre cómo debe funcionar el turismo.
NO HAY POR DÓNDE
A menos, claro, que algún poblador de Machu Picchu pueblo lo vea bonito. Estaríamos como en constelaciones diferentes.
NO DEJARLO ASÍ
Es evidente que los pobladores de Machu Picchu pueblo tienen su conflicto interno, que la paralización no les ha significado otra cosa que pérdidas para ellos mismos. Mientras sea el turismo nacional el que llegue, en su mayoría, es momento de atreverse a un cambio más radical. Es solo una pausa, pero debe ser el inicio de una solución. No decimos cuál, solo que sea respetuosa, que deje satisfechas a las partes, pero hay que corregir esto ya, para ayer.
PARA EMPEZAR
Primera medida: informe técnico de estas construcciones, al lado de un río que puede cargar. Incluso si soportarían un sismo, que no es imposible en ceja de montaña.
VIVIR LO NUESTRO
Segunda medida: hay que ver si locales que funcionan como negocios son a la vez vivienda, si hay habitaciones sobre cocinas, si hay una buena política de prevención considerando que negocios y viviendas tan cercanos no ayudan a seguir los protocolos anti covid-19.
AUTORIDAD MANDA
En términos de ajedrez, tenemos que tener capacidad de enroque, o nos va a pasar que nos paran los trenes y nos echan abajo el turismo varias veces al año. No hay que ser experto para adivinar que esa informalidad que los hace confundir nuestra moneda con suelas, debe estar en cada ladrillo, cada instalación eléctrica, cada piso adicional. Es hora de convencer a la autoridad a empezar la solución del tema, o mejor dicho, que no les queda otra, o declaramos esos edificios inhabitables y esos negocios, entre tanto plástico al lado del río, inviables.
CASI UN EJEMPLO
El que vende alfajores en la esquina no le va a poner condiciones a la calle, al barrio, y menos al distrito. Sería un desgobierno. Sin menospreciar. Trabajador respetable el que vende alfajores, seguramente, pero no por el hecho de que lo respetemos, se va a ir al otro extremo y nos va pedir cambiar la calle. Las condiciones las ponen las autoridades con ayuda de técnicos, no el antojadizo, lleno de prejuicios, que solo busca mantener privilegios.
FINALMENTE
Sí, debe revisarse el modelo completo de todo el desarrollo turístico, pero será cuando empiece el nuevo gobierno. Mientras tanto, adelantemos los estudios y afinemos la estrategia para no dejarnos jaquear nunca más. Esto que ha pasado tiene que ser el inicio del final. Hasta la next
Por: Oscar Argumanis / oargumanis@tnews.com.pe
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